Haciendo Discípulos

Historia por Jorge Agüero

La Gran Comisión de Jesús en Mateo 28:18–20 destaca tres verbos importantes: id, haced (discípulos) y enseñar.

Sin embargo, id, haced y enseñar requiere pasos preliminares para cumplir con éxito el mandato de Dios. Jesús no incluyó estos tres pasos en su mandato porque estaba implícito que, al final de su ministerio de tres años, sus discípulos ya los conocían:

Id. Es difícil seguir una orden u obedecerla a menos que confíe en la persona que da la orden. Conocer a Jesús de manera personal nos da la seguridad y la confianza de que el mandato de “id” será una bendición personal y una bendición para los demás. El éxito de “id” está asegurado porque vamos con su poder y autoridad. Jesús dio repetidamente órdenes a sus discípulos (ver Mateo 21:2; 26:18; 28:10). “Id” no es una opción; Es un mandato. La victoria está asegurada por Dios cuando cumplimos la orden “id”.

Haced. Primero se debe ser un discípulo de Jesús para hacer a otros discípulos de Él. Es paradójico tratar de disciplinar a otros cuando no somos disciplinados nosotros mismos. En otras palabras, la tarea de hacer discípulos para Jesús tiene una mejor probabilidad de éxito si somos los primeros discípulos de Él, ya que un ciego no puede guiar a otro ciego porque los dos caerán en el mismo agujero (ver Lucas 6:39).

Enseñar. Jesús dice que debemos enseñar a otros a guardar todas las cosas que Él ha mandado. Esto requiere un conocimiento previo de lo que debemos enseñar. No podemos enseñar y compartir lo que no sabemos. Solo podemos enseñar con éxito “lo que hemos visto y oído” (1 Juan 1:3, NVI).

El maestro que enseña requiere un aprendizaje continuo. Lo mismo se requiere de los discípulos de Jesús. Requerimos aprendizaje continuo; no solo de la doctrina de Jesús sino de la persona de Jesús. Es entonces cuando podemos cumplir victoriosamente la comisión divina de “id, haced discípulos y enseñar”.

Jorge Agüero es el presidente de la conferencia de New Jersey.