Corra el Riesgo

HIstoria de Winston Simpson

Cuando planificamos una campaña Evangelística, pensamos en comisiones, un local y sobre todo en un buen predicador, o un evangelista con experiencia. En el distrito norte de Ohio, específicamente en la Iglesia de Willard el pastor pensó en que era hora de correr riesgos. En lugar de hacer lo tradicional y lo que dice la lógica, debíamos de probar hacer evangelismo con los jóvenes de nuestra Iglesia. Se eligieron siete jóvenes, los cuales nunca habían predicado, pero tenían el deseo de hacerlo en el nombre de nuestro Dios. Los nombres de los jóvenes son: Francisco, Jennifer, Fanny, Aranza, Eiby, Kevin y Emanuel.

Al llegar la fecha de la campaña, del 19 al 25 de febrero de 2017, era evidente el nerviosismo, la tensión, falta de seguridad en los jóvenes. De igual manera, el pastor también no dejo de preocuparse, sabía que se estaba corriendo un riesgo con la campaña en manos estos jóvenes que nunca habían predicado. Podría ser que en la primera noche el predicador decepcionara al público y la gente no regresara más durante la semana. Sin embargo, algo impresionante sucedió; cada noche se llenaba más y más el salón, la última noche tuvimos más de 30 visitas en la reunión. Humanamente cualquier predicador o pastor con experiencia hubiera llegado a la conclusión que se estaba desaprovechando la campaña con los predicadores novatos. Al final de la campaña fue evidente que el poder del Espíritu Santo estaba obrando en el corazón de los oyentes porque cinco personas fueron bautizadas y doce han quedado recibiendo estudios bíblicos. La honra y la gloria sean para nuestro Dios.

El riesgo no es quien predica, el riesgo es no confiar en la obra del Espíritu Santo. Para los jóvenes esta es la promesa del Espíritu Santo (Joel 2:28), esta obra sigue adelante no por los que tienen más experiencia, sino por el poder del Espíritu Santo (Zacarías 4:6). Los jóvenes también pueden ganar almas para Cristo.